No hay palabras suficientes para
expresar lo que sentimos tras la devastadora noticia por el reciente
fallecimiento de nuestra compañera Almudena.
Son siempre tristes las despedidas, cuanto más si el que se va ha tenido en
vida la dimensión humana de las grandes personas la sencillez y la generosidad.
La muerte puede ser el fin de una
vida pero no de una relación, seguiremos queriéndote a pesar de no tenerte físicamente y con el
tiempo, estos recuerdos nos confortaran y nos harán más fuertes.
Te recordaremos siempre con tu
sonrisa Almudena, te mantendrás con nosotros en nuestra memoria, nos has
honrado con tu amistad y nos sentimos orgullosos de ello.
Descansa en Paz.
AIPAME reprueba la violencia de género y manifiesta su repulsa ante la muerte de Almudena
Matarranz Velasco, víctima de la violencia machista.
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